Es un procedimiento quirúrgico que disminuye el tamaño de los senos mediante la extirpación de tejido glandular, graso y piel y con la intención de crear unas mamas más pequeñas, ligeras y firmes acordes al resto de su anatomía corporal.
En su primera consulta evaluamos el tamaño y la forma de las mamas, firmeza de la piel, exploración de las mamas, condición general de salud. El paciente debe expresar cuales son sus expectativas de una manera libre y franca para así ofrecerle la técnica quirúrgica mas conveniente , como también explicarle los posibles riesgos, limitaciones y cicatrices. Un perfil mamario por imagines podría ser solicitado antes de la intervención. Se indicara estudios de laboratorio, valoración cardiovascular pre-operatoria incluyendo la supresión de ciertos medicamentos, tales como, la aspirina quince días antes, tabaco, alcohol y ciertas vitaminas.
La cirugía se realiza bajo anestesia regional asistida con sedación. Existen técnicas variadas sin embargo en la mayoría de ellas se realiza una incisión alrededor de la areola que continua hacia abajo para seguir las curvas naturales debajo de la mama en forma de L o T invertidas que con las modificaciones modernas de las técnicas se han logrado disminuir en tamaño. El cirujano remueve el exceso de tejido glandular, grasa y piel, recoloca el complejo areola pezón en su nueva ubicación manteniendo este su unión a los vasos sanguíneos y nervios con lo cual podemos mantener la sensibilidad normal o casi normal de sus pezones; posteriormente se hace el armado de la mama obteniendo su nueva forma, tamaño y contorno. En la mayoría de los casos usamos drenajes por varios días, vendajes acojinados y alta al día siguiente con una indicación de antibióticos orales, desinflamatorios, vitaminas y curas. Usará un brassier medicado por varios meses y tendrá recomendaciones post operatorias a corto y mediano plazo pudiendo reincorporarse en sus actividades habituales en un periodo aproximado de tres semanas.
El resultado final de esta intervención se puede apreciar en una periodo de tiempo de seis a ocho meses posterior a la intervención quirúrgica, mientras los cambios de forma y tamaño de las mamas son inmediatos, los dolores de espalda y nuca desaparecen a los pocos días de la operación.